Fiona se
casa con un músico, uno de los pocos tíos que parecen decentes para ella, pero
como siempre, vuelve a cagarla. Desafortunadamente Jimmy vuelve a la acción y
ella comete el error de acostarse con él. Además, parece estar enamorada de
Sean, su jefe, el cual también es un buen tipo.
La cague las veces que la cague, no puedes odiarla.
Kev
y V
pierden protagonismo al tener a los bebés y solo discuten porque V no puede
seguir dándoles leche. Se ponen los cuernos mutuamente y parece que todo se va
desintegrando en su matrimonio.
El desastroso Frank hace que un gran personaje como Sheila abandone la serie en
esta temporada y conoce a una chica enferma de la que depende y a la que no
desea hacerle ningún mal. Por primera vez tiene algo por lo que vivir, y lo
pierde.
Lip
intenta
que Mandy se quede, pero su novio negrata y maltratador la obliga a irse con
él. A parte de eso, como siempre, tiene problemas con el dinero y tiene que ir
haciendo “cosillas” para conseguir pagarse la matrícula. Sus relaciones
amorosas decaen por momentos y vemos cómo mantiene relaciones sexuales con su
profesora (interpretada por Sasha Alexander, Dr. Isles de la serie Rizzoli
& Isles).
Es imposible no enamorarse de él.
A Ian
le diagnostican la enfermedad de la bipolaridad y pasa por muchas
dificultades durante esta temporada. Decide dejar a Mickey. La relación de
ambos es bonita en cuanto al amor, pero muy dura en cuanto a la agresividad que
muestran ambos. Antes solía ser Mickey el desequilibrado, ahora sin duda lo es
Ian.
Sammi
desaparece momentáneamente, Carl y su sobrino están en la cárcel- reformatorio
y Debbie vive obsesionada con tener sexo con chicos y quedarse embarazada.
Entre lío y lío nunca entiendes nada.
Cuando te acostumbras al comportamiento de un personaje, en la siguiente
temporada actúa completamente diferente y cambias de opinión sobre él. Es el
encanto de Shameless, esperarte cualquier cosa de ellos.
¡Una temporada para ponerme al día!
[UnexpectedStorm]
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