La segunda temporada de Shameless solo ha
conseguido que me enganche más. Actualmente voy por casi la mitad de la tercera
temporada y no puedo parar.
En la segunda temporada las cosas cambiaron
respecto a la primera. Lo único que nunca cambia es Frank, quien la caga
constantemente y llega a decepcionar hasta a la hija que más lo quiere: Debbie.
Lip, que se da cuenta de que está totalmente
enamorado de Karen, sale decepcionado por enésima vez. Karen empieza a salir
con un hombre (Jody, 39 años) y decide casarse con él. Se da cuenta de que está
embarazada y Lip la ayuda durante el embarazo, también intentando averiguar si
él es el padre. La decepción total llega al final, cuando toda la familia
Gallagher está en la sala de parto y Karen tiene a un bebé asiático con síndrome de down.
Sheila, la madre de Karen, decide quedarse con el
bebé y empezar una relación con Jody (al cual su hija repudia después del
matrimonio) y Karen se va de casa y desaparece.
Sheila cura por sí misma su agorafobia y por fin
podemos ver cómo es en realidad y cómo empieza a rehacer su relación con el
exterior.
Fiona, que trabaja sobre todo de camarera en una
discoteca, se enrolla con distintos chicos, aunque sigue echando de menos a
Steve. Comete el error de llamar a Steve dos veces y éste termina apareciendo
casado con una brasileña que es hija de un traficante de drogas. Él le asegura
su amor, pero ella no termina de confiar en él.
Lo más destacable de la temporada ha sido el hecho
de que Fiona y Lip discutiesen por el futuro. Lip, creyendo que era el padre
del hijo de Karen, decide abandonar los estudios y hace un trato con Fiona para
que ésta se saque el título. Al final ella se saca el título y él se presenta a
los exámenes finales.
La verdad es que es un desperdicio que Lip, que es
una persona muy inteligente, lo desperdicie todo por chicas y por creer que es
el único responsable de su familia. Fiona no es perfecta, y la caga alguna que
otra vez en cuanto a la economía, pero echo de menos la complicidad de ambos
cuando actúan con una mínima inteligencia.
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